¿Qué es el destintado y por qué es importante en el reciclaje de plásticos?
En el camino hacia una verdadera economía circular, uno de los mayores retos del sector del plástico es conseguir materiales reciclados de alta calidad. Y, aunque pueda parecer un detalle menor, las tintas impresas en envases plásticos, tanto flexibles como rígidos, suponen un gran obstáculo para el reciclaje, ya que condicionan directamente el valor, la apariencia y la pureza del material reciclado.
Estos envases plásticos suelen llevar impresas tintas que tienen un doble propósito: por un lado, informan al consumidor sobre aspectos como la composición, los alérgenos o los valores nutricionales; por otro, cumplen una función comercial al hacer el producto más atractivo. Si bien son fundamentales para la comunicación al consumidor y el marketing, las tintas de impresión representan un desafío considerable en el proceso de reciclaje de estos materiales.
Las tintas de impresión están formadas por una mezcla de resinas, disolventes, pigmentos y aditivos, y su composición varía en función del método de impresión y del tipo de plástico utilizado como base.
Con el objetivo de superar estos desafíos y lograr reciclados plásticos de mayor calidad, ha ido creciendo el interés por las tecnologías de eliminación de tintas. No obstante, pese a su importancia, todavía existen pocas soluciones tecnológicas eficaces que consigan eliminar correctamente las tintas presentes en los envases plásticos.
¿Qué es el destintado?
El proceso de destintado busca precisamente eliminar las tintas adheridas a los plásticos, tanto en materiales flexibles como bolsas, films, etiquetas o envoltorios, como en ciertos formatos rígidos.

¿Por qué es importante el destintado en el reciclado de plásticos?
1. Mejora la calidad del material reciclado
El objetivo de cualquier reciclador no es solo procesar residuos, sino obtener un polímero reciclado que pueda reintroducirse en el mercado. Cuando los envases impresos se reciclan sin eliminar previamente las tintas, el material resultante suele tener colores oscuros —como marrón, gris o negro—, lo que limita su uso a productos de bajo valor añadido.
Además, las tintas no solo afectan al color: también pueden liberar compuestos volátiles durante el reciclaje, generando malos olores y alterando propiedades clave del plástico recuperado, como la rigidez, la resistencia o la densidad. Esta combinación de factores no solo reduce la calidad del material, sino que también afecta su valor comercial, provocando que en muchos casos sea rechazado en las plantas recicladoras por considerarse “demasiado sucio” o con “exceso de tinta”.
En este sentido, el destintado no es solo una cuestión estética, sino funcional.
2. Reduce la contaminación química
Algunas tintas contienen metales pesados, disolventes o adhesivos que pueden transferirse al material reciclado si no se eliminan correctamente. Esto representa un riesgo para aplicaciones sensibles como el packaging alimentario, donde se requiere una alta pureza del material.
El uso de tecnologías como las de Fych, que incluyen tratamientos avanzados como de deslaminación de materiales multicapa y descontaminación, es esencial para garantizar que los plásticos reciclados no solo sean funcionales, sino también seguros y de alta calidad.
3. Permite cumplir con normativas y estándares
Con el impulso de la economía circular y la regulación europea, se exigen materiales reciclados de mayor calidad. El destintado se convierte así en un requisito técnico para acceder a ciertos mercados y cumplir con las normativas vigentes en cuanto a seguridad y reciclabilidad.

Un desafío añadido por la complejidad de los envases multicapa
El reto se complica aún más cuando hablamos de envases multicapa, como aquellos compuestos por varias capas de plásticos y otros materiales que se combinan para ofrecer propiedades de barrera, como la protección frente a la luz, la humedad o el oxígeno.
En este tipo de estructuras, la tinta no suele estar en la superficie externa, sino encapsulada entre las distintas capas de materiales. Esta particularidad impide que los métodos convencionales de destintado y reciclaje, diseñados para envases monocapa, resulten eficaces. Las tecnologías tradicionales no logran acceder a esa tinta oculta ni separarla del resto del material.
Para poder reciclar eficazmente este tipo de envases complejos, es necesario aplicar tecnologías avanzadas capaces de deslaminar las capas, exponer la tinta y eliminarla sin comprometer la calidad del polímero.
Reciclaje mecánico avanzado en Fych
En Fych, contamos con una tecnología de deslaminación única que forma parte de nuestro enfoque de reciclaje mecánico avanzado. Esta tecnología incluye una etapa de lavado en profundidad, en la que se emplean aditivos específicos capaces de eliminar tanto los adhesivos como las tintas presentes en los envases plásticos, incluso en estructuras multicapa.
Este proceso no solo permite separar eficazmente las capas de los envases complejos, sino que garantiza que los plásticos reciclados, ya sean rígidos o flexibles, alcancen niveles óptimos de limpieza y pureza para su reutilización en nuevas aplicaciones.
Gracias a esta solución integrada, el destintado no se trata como un proceso aislado, sino como un resultado directo y eficaz de nuestra tecnología patentada.
Conclusión
En un contexto donde las normativas se endurecen y los clientes demandan mayor trazabilidad y pureza en los materiales, incorporar tecnologías eficaces de eliminación de tintas marca la diferencia entre un reciclado convencional y uno avanzado, competitivo y sostenible. Apostar por soluciones que incluyan el destintado no solo mejora el rendimiento de los procesos, sino que permite transformar residuos antes problemáticos en recursos con alto potencial de reutilización.